Covalski el peón ciego
Antes que nada, y en referencia a mi pasado blogg, mi vida no ha cambiado mucho del todo. De hecho, mis actividades siguen siendo las mismas. Sigo tomando café (menos), comiendo huevo (menos), cerveza (igual), y aun mejor, sigo escribiendo en ingles jajajajajaja (por lo menos eso es lo que pienso). Por otro lado, mi vida sí cambió en un aspecto que en mi opinión no tenían por que haber cambiado. Mi padre me decía de niño “…hay años buenos pero también los hay malos”. El año (2006) que hoy termina fue para mi, sin lugar a duda, un mal año. Los eventos acontecidos durante 2006 me dejaron claro lo difícil que es ver el lado positivo en un entorno negativo. Aprendí que el lado positivo muchas veces está escondido en las anécdotas de vida de otros especies animales como la de los perros. Por ejemplo, hace un par de meses mi esposa (Nairán) y yo estabamos viendo a nuestro nuevo perro (Doohan) morder su hueso favorito. Nairán me dijo que el único que verdadermante se benefició después de la muerte de su padre (Juan José) era el pinche perro. La explicación es simple, mi esposa adoptó a Doohan ya que éste era el perro de Juan José y además, Doohan es el hijo de nuestra ya bien conocida perra (Kenya). El perro (ó como dijo Nairán: el pinche perro) hoy en día come mejor, juega más, convive más con seres humanos y tiene el pelo más suave. En pocas palabras el perro se puso más bonito a consecuencia de un evento trágico lo cual ejemplifica el viejo y conocido concepto de fuerzas opuestas que se complementan. Esto es, dentro de aquello que consideramos malo hay algo siempre bueno.
Fuerzas opuestas que se complementan una a la otra son conceptos del Ying y el Yang que explican que el bien complementa al mal y el mal complementa al bien. Estos conceptos, que todos conocemos, son difíciles de tener presentes cuando nos encontramos en un entrono negativo. Aquél que en un entorno positivo encuentra lo negativo de la situación positiva podrá reflexionar sobre sus inmediatas intenciones, pero aquel que se encuentra en un entorno negativo es poco probable que acepte que exista algo positivo dentro de lo desfavorable. Un ejemplo de la relación entre el bien y el mal es el nuevo estilo de vida de Doohan. Esto es, aunque Doohan vive mucho mejor, el perro ahora tiene que enfrentar a su castrarte madre (Kenya the enmascualtor). El nuevo estilo de vida de Doohan tiene un precio muy alto ya que su madre le obliga a jugar “Covalski el peón ciego”. Este juego es sumamente conocido entre perros y seguramente muchos ya lo conocen. Aún así les explico brevemente las reglas del juego. Un perro siempre gana y el otro siempre pierde, si sucede lo contrario habrá sangre. Para desfortuna de Doohan, él es Covalski y Kenay es la que siempre gana. En fin… la relación entre el mal y el bien dejan claro que ganarse la lotería no asegura felicidad pero, pensar en no ganarse la lotería tampoco la garantiza. El punto de todo esto es que en la superficie de nuestras vidas podemos decir que hay años buenos y malos pero, si hondamos un poco más nos damos cuenta que no hay absolutos. Obviamente es más fácil ver lo malo dentro de lo bueno que lo favorable dentro de la desgracia, pero aún así los dos siempre existen.
El juego de Covalski el peon ciego surge de un peón Ruso (Covalski) que trabajó en mini-sub (submarino nuclear) durante muchos años. Covalski fue el brazo derecho del Capitán Nelson con el cual recorrió los siete mares, y aunque Covlaski le salvó la vida al Capitán Nelson varias veces, éste nunca lo ascendió de puesto. Covalski trabajó e hizo siempre lo que quiso, pero eso nunca le aseguro un incremento de salario. De hecho, Covalski fallece después de aceptar ser conejillo de indias en pruebas genéticas que a la larga lo acaban transformando en hombre lobo. La tragedia acaba en que Covalski es perseguido por el Capitan Nelson hasta que éste lo acaba cazando a escopetazos (este evento no sale en la serie de TV pero es el trágico final de la novela).
Todos hemos experimentado de una u otra manera la miseria de Covalski. Todos hemos experimentado momentos en la vida que son imposibles de controlar, imposibles de vivir, imposibles de tragar… Todos hemos tenido que bajar la cabeza y aceptar la frustración y/o el dolor de la manera en la que Covalski lo hizo. La vida se representa en lapsos o ciclos que marcan periodos en nuestras vidas. Por ejemplo, hay ciclos en la vida donde hay muchas bodas, ciclos en la vida donde hay muchos nacimientos, temporadas de vida con muchas graduaciones, bautizos, conciertos, fiestas…y por supuesto ciclos de vida con mucha muerte. ¿Por qué parece que la vida se manifiesta en forma de ciclos? Covalski nunca lo supo y si lo supo no lo supo comunicar. Mi intención no es proponer una teoría que explique la manifestación de la vida sino compartir con ustedes un aprendizaje en un ciclo de muerte. Este año ha sido para mí un periodo representado por la muerte y ha sido una lección de vida poder ver lo bueno dentro de lo malo. Mi año comenzó con la muerte de mi abuela seguida por la de mi suegro y otras más. La muerte de mi abuela y mi suegro estuvieron separadas por menos de 10 días y ésta última por 30 días con la muerte de la madre de mi suegra. Por un momento sentía que una muerte desencadenaba otra y otra y otra, etc. En fin, al principio pensaba que estar rodeado por tanto sufrimiento de pérdida era la peor experiencia de mi vida. También pensé que la muerte acechaba mi propia vida. Al paso del tiempo caí en la cuanta que temer a la muerte es vivir sin entender la vida. Es decir, los seres vivos estamos unidos tanto por la vida como por la muerte. La muerte es algo que no vemos tan seguido como es la vida, pero todos la llevamos dentro (por decirlo de alguna manera) y es por lo tanto algo que todos compartimos. Yo se que lo que escribo suena OBVIO, pero es hasta ahora que lo experimento en vida. Yo pensaba que la muerte se comparte con los muertos y la vida con los vivos y por lo tanto hablar de la muerte en vida es algo que era prefierible evitar. Fácil es decirlo y tan fácil es escribirlo que parece un argumento de lógica básica pero, verdaderamente llegue a sentir que la muerte me acercaba más a la vida. Detrás del dolor de pérdida que compartí con algunos de ustedes hay en mí un sentimiento de unidad hacia ustedes y otros humanos que jamás había experimentado. Mi intención no es proponer un suicidio colectivo para promover amistades, lo que quiero recalcar es que por momentos pude ver lo positivo de una desgracia pero, solo por momentos, solo por momentos…
Me despido deseándoles lo mejor de lo mejor en éste año nuevo 2007. Mi opinión es que será un año lleno de nacimientos.
Los quiere
||gasa||
Descansan en Paz:
19xx - 2006
Juan José Ramirez (mi suegro)
Carlota López (mi abuelita)
Abuelita de Nay
Papa de Cindy
Toto (Abuelito de Cata)
Mamá de David
Hermano de Gonzalo
Papá de Paola (amiga de Nairán)
Dr. Villaseñor (Oftalmólogo de mi mamá)
Pepa (perrita de Aranza)
Covalski
“You gotta learn to live and live and learn
You gotta learn to give and wait your turn”
The Raconteurs